LOS BLANQUIAZULES SON LOS MÁXIMOS GOLEADORES LEJOS DE CASA PERO...
Una derrota y una victoria por la mínima completan el pobre balance del conjunto de Valverde en Montjuïc
Jonathan Soriano es el único españolista que ha visto puerta en Montjuïc en este inicio de temporada
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Los problemas del Espanyol en el Estadi Olímpic vienen de lejos. Es la eterna asignatura pendiente del equipo en las últimas temporadas. Los puntos vuelan de Montjuïc con una facilidad pasmosa y tanto Valverde como el vestuario continúan sin dar con la fórmula mágica que permita disfrutar a la parroquia local del mejor juego de su equipo que acostumbra a desplegar en toda y cada una de las salidas. El arranque de la presente temporada no ha hecho sino acentuar la sensación de debilidad españolista.
El Valladolid asestó un mazazo en toda regla, de aquellos que duelen y abren profundas heridas, frente al Getafe sonó la campana a última hora y ahora es el turno del Deportivo. Un choque que se presume vital para saber si el Espanyol está en condiciones de aspirar a algo más que la simple permanencia.
Mucho se ha especulado sobre las causas del mal juego del equipo en el Estadi. Unos apuntan al exceso de presión, otros hablan de falta de madurez en una plantilla muy joven y hay quien lo achaca a un estilo de juego ideal para jugar a la contra pero con serias dificultades para llevar la iniciativa.
Sin embargo, la conclusión final es inapelable y se ve perfectamente reflejada en la clasificación. El equipo rinde más a domicilio y eso se traduce directamente en goles y puntos.
El dato de los goles es asombroso. Cinco son los partidos que se han disputado en lo que va de Liga y el Espanyol ofrece un dato espectacular: con sólo una diana, es el equipo menos goleador de Primera en casa junto a otras escuadras. En contrapartida, con seis goles en tres salidas, es el máximo goleador a domicilio, un honor sólo al alcance de los grandes. Increible pero cierto.
La falta de pólvora en Montjuïc no ha sido fruto de la casualidad ni de la mala suerte. El Valladolid fue mejor, se llevó los tres puntos y consiguió que en noventa minutos la delantera blanquiazul apenas si inquietara a su guardameta. Frente al Getafe casi se repite la historia. Es cierto que se ocasionó algo más de peligro, pero tuvo que ser la entrada de Jonathan y un afortunado remate a última hora, cuando se daba por bueno el empate sin goles, cuando se obró el milagro y la afición perica pudo disfrutar del único gol marcado en la temporada 07-08 en Montjuïc.
La carencia de dinamita en casa contrasta con la borrachera goleadora del equipo cada vez que coge las maletas. Y si no que se lo pregunten a Betis, Recreativo e, incluso, al Sevilla. En todos estos campos no ha existido falta de pegada que valga. La delantera blanquiazul se ha calzado las botas y ha resuelto con nota su cometido. Luis García se ha erigido en el gran estilete y con sus tres goles figura entre la elite de los pichichis nacionales. Tamudo, ya restablecido de su lesión, se apuntó al festival de Sevilla con su gol decisivo. La pareja funciona, el dúo de vanguardia ya está en forma, pero siempre a centenares de kilómetros de su parroquia.
El Estadi Olímpic se resiste. El Deportivo será la tercera piedra de toque. Se trata de un equipo en plena crisis deportiva e institucional, un bloque que de la mano de Miguel Angel Lotina sólo está cosechando disgustos, aunque su recuerdo no es nada grato en Montjuïc. Ya en plena decadencia, el conjunto coruñés ha sido capaz de puntuar en sus tres últimas visitas. Un dato relevante y que debe servir para centrar la atención al máximo.
Un Espanyol crecido y ambicioso tiene una gran oportunidad para dar un golpe de efecto. Tres puntos en juego, un rival asequible y el premio de una clasificación brillante bien merecen acabar con la sequía goleadora ante la sufrida afición perica.
Clemente podría seguir en el banquillo
Tras la buena imagen que ofreció el equipo en el Sánchez Pizjuán se espera que Ernesto Valverde aparque cualquier tipo de revolución. El técnico está por la labor de dar continuidad al mismo bloque y sólo incorporaría un par de retoques puntuales, como puede ser el caso de Tamudo o Zabaleta, reservados inicialmente frente al Sevilla para mejorar su puesta a punto pensando en el choque frente al Deportivo.
El caso más llamativo, una vez más, es la particular pugna deportiva que mantienen Clemente Rodríguez y Javi Chica por ver quien se gana la confianza del técnico y se afianza como titular en el lateral izquierdo. En estos momentos, el canterano parte con cierta ventaja y, pese a su irregularidad en los partidos disputados, su rendimiento es sensiblemente superior al del argentino. Curiosamente, el duelo hasta la fecha se inclina en favor de Clemente, que en tres de los cinco encuentro disputados ha sido titular, el resto ha sido para Chica, pero el Deportivo podría equilibrar esta singular batalla.
El capítulo de dudas se completa en la banda derecha, donde Valdo y Coro también dirimen su particular litigio. En cuanto al resto, no se prevén cambios.
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