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domingo, 19 de agosto de 2007

Quedan pocas entradas a la venta para ver el desenlace de la Supercopa

UN CENTENAR DE AFICIONADOS COMPRARON LA SUYA EN LAS ÚLTIMAS HORAS

Cerca de un centenar de aficionados han hecho cola este domingo desde primera hora de la mañana frente a las taquillas del Estadio Santiago Bernabeu con la esperanza de conseguir una de las últimas entradas para el partido de vuelta de la Supercopa, que enfrentará esta noche al Real Madrid y Sevilla.

Con las entradas en la mano, las esperanzas se centraban ya en la deseada victoria madridista. Los seguidores merengues, resignados tras los últimos resultados del equipo, se conforman una victoria raspada, pero que termine con los blancos celebrando su primer título de la temporada. Sólo el precio de las entradas, por las que se han llegado a pagar 110 euros, desdibujaban la sonrisa de la cara de los aficionados.

La otra cara del partido es el Sevilla, cuyos aficionados más madrugadores no dudaron en pasear sus coloradas camisetas por los alrededores del estadio madridista. Muchos de los seguidores encuestados dicen haber aprovechado a pasar el fin de semana en la capital y también esperan la hora 'H', las 22:00 horas, para que el balón eche a rodar y esperan ver un triunfo de los suyos.


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