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domingo, 28 de octubre de 2007

El equipo jugará más para Henry

EL TÉCNICO HA PEDIDO A XAVI E INIESTA QUE BUSQUEN MÁS AL FRANCÉS


El ‘crack’ francés ganará protagonismo a partir de ahora porque hay órdenes de aprovechar más sus desmarques

Javier Miguel

Thierry Henry va a multiplicar su peso específico dentro del equipo a partir de ahora. Con un Ronaldinho en horas bajas y con un Leo Messi que hace la guerra por su cuenta, pero que en todo caso extrae oro de cualquier ocasión, Frank Rijkaard ha elegido al crack francés para que dé sentido al juego colectivo en fase ofensiva. Sin embargo, para conseguir su objetivo ha de encontrar aliados en el mediocampo y por eso en el entrenamiento del pasado viernes hizo un especial marcaje tanto para Iniesta como para Xavi, que han de convertirse en los suministradores de balones para Henry. Se acabó la posesión interminable e ineficaz de balón porque sí y el ‘tiqui-taca’ sin sentido. Ahora el equipo ha de jugar más vertical, sobre todo ante rivales que se cierran atrás, para buscar la espalda a la defensa e intentar aprovechar la presión para pillar al rival desguarnecido en la retaguardia. Y es que el más listo de la clase para romper defensas con este movimiento de desmarque es Thierry Henry. En la sesión del viernes ya lo demostró marcando cuatro goles durante el partidillo. Hoy ensayarán ante Almería esta nueva forma de jugar en la que el ‘crack’ francés asumirá más galones en la fase de ataque.

El propio Rijkaard fue el primero en reconocer este cambio de estilo de su pizarra con el fin de hacer añicos a los equipos que se cierran atrás con todo su contingente. Y es que el entrenador holandés se ha cansado de leer y escuchar críticas hacia su fichaje más flamante: que si está lento, que si aún está lejos de su mejor estado físico, que si le falta mucho para ser aquel jugador que deslumbró en la Premiere League, que si no se siente líder, que si tiene la pólvora mojada y así un largo etcétera de argumentos desasosegantes. Pues bien, ahora el entrenador subraya que el problema no es el ex jugador del Arsenal sino el resto del equipo -poniendo especial hincapié a los centrocampistas- que no saben ver ni encontrar al francés cuando inicia los movimientos de desmarque al espacio, desaprovechando así una excelente oportunidad para abrir el cerrojo de las defensas rivales. El mensaje ayer de Rijkaard fue tan rotundo y contundente como lo eran en su día los puños del boxeador Mike Tyson: menos ‘tiqui-taca’ y más verticalidad.

“¿Cuántas veces recuperamos el balón y Henry ya se está desmarcando en profundidad? Sus movimientos son perfectos. La gente de mediocampo tiene que ser más consciente de esta movilidad del francés. Cuando uno quiere llegar al área utilizando muchas estaciones se acaba de perder por el camino. Cuando hay un rival que están todos cerrados atrás hay que aprovechar esos momentos para matar el partido”, subrayó el entrenador blaugrana en su apología hacia el ‘crack’ francés.

Vamos, que los Iniesta y Xavi han de prestar más atención a los movimientos de Henry a la hora de buscar espacios en el ataque. Y es que con Ronaldinho sin encontrarse cómodo en el campo y con Messi que hace del fútbol una cuestión personal en la que casi siempre sale ganador, no hay duda de que el ‘crack’ que mejor puede aprovecharse del sentido del equipo es Henry. “El equipo ha de ser más consciente de las características de Henry. Sus movimientos son muy buenos para castigar al rival, pero no siempre sabemos aprovecharnos de este tipo de situaciones. Henry es un experto en buscarle la espalda a la defensa y necesita pases en profundidad para aprovechar esta situación. A veces nos perdemos demasiado con el juego de posición y control”, argumentó Rijkaard, en un alarde de sinceridad que dejó a todos los presentes en la rueda de prensa un tanto desconcertados.

Tanto es así que rápidamente le preguntaron si su pizarra defendía la tesis de que era el equipo quien tenía que adaptarse a Henry y no el francés adaptarse a las características del equipo. El entrenador holandés respondió, sin acabar de mojarse del todo, que “Henry nos da un plus que hemos de saber aprovechar”.

VERTICALIDAD

El técnico blaugrana ahondó su argumento explicando que la presión sin balón no sirve de nada si luego no aprovechas la situación de ventaja que se crea al tener a la defensa rival desordenada: “Echamos de menos un poco de más verticalidad porque contra equipos bien organizados atrás es muy complicado llegar al área pasando por tantas estaciones. La presión de balón es muy positiva, pero luego hay que saber aprovecharla”.

El holandés evidenció la necesidad que tiene su equipo de contar con jugadores mucho más directos para romper la monotonía de la horizontalidad y de lo previsible: “Henry es como Eto’o, son jugadores directos, que siempre buscan la portería y que aprovechan muy bien los espacios que tienen. Por eso fichamos a Henry, porque nuestro equipo necesita a este tipo de jugadores y no es ningún contrasentido tenerlo con nosotros como tampoco lo fue fichar en su día a Eto’o”.

En todo caso, Rijkaard se mostró muy tranquilo sobre el futuro de Henry en Barcelona, “la verdad es que no estoy nada preocupado”, porque ”se trata de un grandísimo jugador y de una gran persona”, que además “está trabajando muy fuerte cada día y actuando con sentido común y sentido de equipo”.


Cruyff vaticinó esta semana que le queda mucho fútbol en sus botas

‘El Flaco’ pidió a través del SPORT el pasado jueves más crédito para el delantero francés, adelantándose en unos días a las declaraciones del entrenador Frank Rijkaard, en este mismo sentido. Y es que Cruyff empezó por constatar que la situación de ‘Titi’ no es fácil, ya que “viene de estar mucho tiempo lesionado y no ha renunciado nunca a ser titular; no se puede olvidar que, con 30 años, viene de jugar cuatro partidos consecutivos”. Asimismo explicó que un jugador de la juventud y calidad de Messi “tampoco ha vuelto con la misma frescura... y eso que tiene sólo veinte años”. Por eso, Cruyff pide un poco de paciencia para el ex jugador del Arsenal. Y es que el holandés está plenamente convencido que “el mejor Henry ya llegará”. Una profecía que toda la afición culé arde en deseos que se cumpla cuanto antes.

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