.


.
Google

sábado, 3 de noviembre de 2007

El padre de Bojan fue quien recomendó el fichaje de Touré

MI RONDO


Fue jugador del Mollerussa en 1988 y ahora se ha convertido en un ‘cazatalentos’ de jugadores.

José Luis Carazo
El padre del joven crack azulgrana fue también futbolista (jugó en el Estrella Roja y OFK de Belgrado y, además, llegó a ser internacional Sub 21, Olímpico y selección absoluta), lo que le ha servido para tener una vista de lince a la hora de encontrar jugadores con mucho talento. Su trabajo en una escuela de fútbol base leridana le sirvió también, tras dejar de jugar en el Mollerussa, de trampolín para entrar a trabajar como ojeador, a las ordenes de Txiki Begiristain. Su cometido principalmente es recorrer palmo a palmo la zona francesa, a donde acude con asiduidad para presenciar todo tipo de torneos juveniles o diversos encuentros de las distintas divisiones galas.

A él se le encomendó pues la búsqueda de un pivote defensivo que aportara mucha fuerza en el centro del campo y que a la vez imprimiera velocidad al juego con sus recuperaciones y entregas rápidas a los puntas. Era el deseo prioritario de Frank Rijkaard para esta temporada y se puso manos a la obra nada más recibir la orden.

Varios fueron los informes que presentó al club azulgrana, pero quien se llevaba la palma, recomendando incluso su fichaje, fue el de Yaya Touré pues para Bojan padre, además de tener las cualidades antes reseñadas, añadía que era un peligroso jugador en acciones a balón parado, con un buen tiro y un remate de cabeza inmejorable por su elevada estatura. Su precio también recomendaba su traspaso, pues entre los elegidos resultaba ser el más barato.

Me cuentan también, que a la secretaría técnica del Barça llegó otro informe de Mahamadou Diarra, del que cuentan, sobre todo en el Real Madrid, que es un ‘Makelele’ de 25 años capaz de hacer el trabajo destructivo, pero no así para el padre de Bojan. En el informe que presentó no recomendaba su fichaje porque por sus características no entraba dentro del esquema de juego del Barcelona, amén de los veintiséis millones de euros que habría que pagar por su traspaso.

Al final, por supuesto, fueron Rijkaard y Txiki Begiristain quienes dieron el OK al fichaje de Yaya Touré, pero quien puso las bases para su fichaje fue Bojan Krkic padre. Al César lo que es del César. Así pues habrá que dar infinitas gracias a este ‘cazatalentos’ que ha dado al Barça un hijo que es la envidia del mundo con tan solo 17 años, que sorprende por sus desmarques, su movilidad y su carácter ganador y un pivote defensivo que aporta muchas cosas en el centro del campo.

No hay comentarios.: